Sucedió el 30 de Marzo de 1989, el presidente François Mitterrand aprobó una obra tan polémica en su día como exitosa en la actualidad: la Pirámide de acceso al Museo de Louvre.
Esta estructura de acero con recubrimiento de cristal, es el umbral de entrada a las principales galerías del famoso museo. Diseñada por el arquitecto chino-estadounidense Ieoh Ming Pei, esta pirámide es tema de actualidad por su 20º Aniversario.
Cuando se presentó, levantó una oleada de críticas que llevaron al arquitecto a modificar la obra, pero aún así la polémica nacional no cesó, dado que parecía un escándalo instalar una obra tan vanguardista en el corazón del palacio real fundado por Carlos V el sabio.
Sin embargo, tiempo después se le dio la razón al presidente Mitterrand puesto que antes de la construcción de la pirámide, las colas eran infinitas y con la obra, se permitió la entrada de 15.000 visitantes por hora.
La gran pirámide está acompañada por dos pirámides más pequeñas, gracias a las cuales los espacios subterráneos se benefician de ventilación y luz natural.
La estructura de la pirámide en cifras se podría clasificar así: 1250 metros cuadrados de superficie, 666 rombos de vidrio, 35’4 metros de largo por 21’65 metros de altura y todo ello en 200 toneladas.
Así pues, y con motivo de su aniversario, desde el día de hoy, 3 de abril, se celebrarán numerosos actos culturales y artísticos en la plaza: espectáculos, conferencias, conciertos, proyecciones luminosas… etc.
Y es de esta manera como se conmemora su gran éxito, después de tanta polémica y tras convertirse en un icono que atrae tantas visitas como la mismísima Gioconda, además de servir de inspiración para la ampliación de otros muchos museos.
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